L’appel du Vide

 “¿Por qué queremos estar siempre donde no nos toca?” Me preguntaba una amiga hace un par de días mientras comíamos. 

Y me siento así, queriendo escapar hacia adelante—otra vez—como siempre. No es que esté mal aquí, ni muchísimo menos, estoy muy cómoda, quizás es eso, estoy demasiado cómoda. Me aburre estar aquí, pero eso no es nuevo, ya sabía que pasaría, sabía que pasaría desde que tomé la decisión de quedarme en España. Y L’appel du vide otra vez, las ganas de nuevas emociones, de nuevos proyectos, de saltar y de cosas— un poco—más grandes. 

Pero sé que no es el momento, y me repito —como un mantra— que tengo que seguir siendo paciente, que ni Madrid ni Barcelona se van a ningún sitio. 

Y llegará el momento otra vez, llegará.